Marbella. -
El teniente de alcalde, del término municipal de Marbella, San Pedro Alcántara, Javier García (PP), ha afeado la denuncia del concejal de Opción Sampedreña, Manuel Osorio, sobre el que la arena vertida en la playa de San Pedro era tierra de obra, manchaba las manos y es desagradable, haciendo una comparación con las de Marbella, a las que calificaba tener un cuidado óptimo y perfectamente peinadas; en este sentido Latinpress.es
se acercó al edil del PP para conocer su opinión.
Esa pregunta ya se le respondió a Osorio durante el Pleno pasado, fue lo primero que nos dijo García, pero debo decirle que lo de Osorio es un juicio de valor, cargado de un solo objetivo, generar alarmismo social y, sobre todo, que no está basado en datos objetivos.
Mire, le señalo algunos datos objetivos sobre este tema: lo vertido es arena, no tierra. Esa arena, el ayuntamiento la consiguió después de unas actuaciones que se realizaron en el borde del dominio público marítimo terrestre en la zona de Las Chapas y, que se han acopiado en parcelas municipales, utilizándose en distintas playas del municipio, en Semana Santa se vertieron en las playas del centro de Marbella y, en la zona de Río Real.
Sobre el color, lo puedo decirle es que se encargaron analíticas a laboratorios especializados, teniendo como respuesta que es arena de buena calidad y, que tiene un porcentaje de arcilla que dan ese color.
Hablamos de arena de buena calidad, pero hay que esperar a la actuación de los fenómenos marítimos, como el oleaje, mareas o, corrientes marinas, para extenderla y mezclarla y, entonces el color cambiará.
Le digo más, lo que no ha dicho Osorio es de quién es competencia todo lo que depende del dominio público marítimo terrestre, pues es competencia del Ministerio de Transición Ecológica, de Demarcación de Costas, que el año pasado solo hizo aportes de arena en Guadalmina, porque consideraban que en San Pedro, desde la desembocadura de Guadalmina hasta el Guadaiza eran playas de pijarros, piedras y, cantos rodados,lo que se tenía que preservar en su carácter natural.
Así que, como administración local podíamos no hacer nada por mejorar esas playas, y lo hemos hecho, aunque el ayuntamiento no tiene derecho al acceso de arena.